Viandas y luncheras

¿Te llevás la comida a la oficina? ¿Les preparás el almuerzo o las colaciones para el colegio a los chicos? Entonces, leé estos consejos para que todo llegue en condiciones:

  • El envase donde transportás la comida tiene que ser de material durable, fácil de higienizar y también de manipular.
  • Si en su interior tiene compartimentos o separadores, mejor. De esa manera podrás llevar en un mismo recipiente un sándwich y una manzana, por ejemplo, sin que se toquen entre sí.
  • Siempre, aunque tengas compartimentos separados, envolvé los alimentos en materiales impermeables. Las bolsas herméticas, el papel film o el de aluminio son buenos. De este modo, además, podrás llevar crudos y cocidos en el mismo envase.
  • Sacá los alimentos de la heladera a último momento. Si podés, prepará la vianda con anticipación y guardala y armadita en la heladera así la sacás a último momento.
  • Si el lugar al que vas no tiene la posibilidad de refrigerar la vianda, entonces incluí una bolsa hermética con hielo en tu vianda.
  • Una vez que comiste, no guardes las sobras en el recipiente. Descartalas y limpiá la lunchera antes de volver a casa así evitás malos olores y contaminaciones.