Cocinar es la pasión de muchos, pero a veces, al hacerlo, manipulamos alimentos con aromas fuertes y penetrantes que se encaprichan en permanecer en nuestras manos por horas.
¡Y no siempre podemos sacar esos olores con agua y jabón! Te contamos tres formas caseras para que puedas cocinar, y que tus manos no queden perfumadas el resto del día.
- Sal: poné un poco en tus manos, humedecé con agua y frotalas por unos minutos. Además de quitar el olor, vas a exfoliar tu piel y dejarla muy suave. Luego, lavá y secá tus manos.
- Limón: los cítricos son muy buenos para reducir aromas no deseados. Poné unas gotas de limón, naranja, mandarina o lima natural en tus manos, distribuilas y dejalas así por unos minutos. Luego, enjuagá tus manos y secalas. Solo vas a tener un suave aroma cítrico, que es más agradable que la cebolla o el ajo.
- Bicarbonato y vinagre: hacé una pasta con ambos elementos y frotala en tus manos. Luego, enjuagá muy bien y disfrutá de ¡tus manos sin olores!