Las legumbres son indicadas por los nutricionistas como parte fundamental de nuestra dieta, ya que poseen vitamina B, bajo contenido graso y son ricas en fibras e hidratos de carbono de absorción lenta. Pero no siempre las incorporamos porque a veces nos caen pesadas o no sabemos cómo cocinarlas. Primero, recordá que las lentejas secas deben estar en remojo durante 12 horas y luego recién podés hervirlas. Eso sí, no sales el agua en la que las remojás.
Si querés, hacelas en una olla a presión y así conservarán mejor los nutrientes. Si no te animás, simplemente hervilas de manera habitual, pero sin echarle sal al agua porque sino endurecerás la piel. Agregales la sal una vez que ya estén cocidas.
Para que no caigan pesadas, el secreto es poner una cucharadita de semillas de hinojo o comino en polvo al agua de la cocción.
