No solo son pequeños y simpáticos, los huevos de codorniz también son muy buenos para salud y por eso es importante que los incorpores tanto en tu dieta como en la de los chicos:
- Aunque su tamaño no es grande, poseen muchas vitaminas, fibras, proteínas y minerales como el fósforo, potasio, calcio y magnesio.
- Es muy recomendado para los niños por su alto contenido de vitamina D, un nutriente esencial durante el período de crecimiento.
- Contiene bajos niveles de colesterol y menos calorías en comparación con los huevos de gallina.
- Proporcionan selenio, un antioxidante que potencia las defensas del organismo frente a todo tipo de enfermedades.
- Además de su gran valor nutricional, ayudan a regular la presión arterial.
- Podés consumirlos hervidos o hacerlos fritos.
- Su forma es atractiva y ayuda a que los más pequeños quieran comerlos sin necesidad de insistir mucho.
- Sumalos a las ensaladas o como guarnición de un plato gourmet.