Los cuidados de la manteca

¿Sabías que la manteca se prepara con leche pasteurizada? Es decir, que en su elaboración es sometida a un temperatura lo suficientemente alta como para matar cualquier tipo de bacteria dañina.

Otro dato que quizás no conocías es que en su composición encontramos un 80% de grasa de la leche, y un 20 % de agua y sal.
Pero más allá de estos datos, lo que nos gusta es comerla, ya sea cuando la usamos para untarla en una tostada o como materia grasa para cocinar. También es indispensable para la elaboración de ciertas masas. Por eso, te damos algunos tips para que sepas cómo conservarla de la mejor manera y poder usarla siempre que la precises:

  • En la heladera suele durar entre dos semanas y dos meses. Esto depende de si tiene o no agregado de sal, lo que permite que se conserve por más tiempo. Por supuesto, siempre fijate la fecha de vencimiento que figura en su envoltorio.
  • Siempre guardala en su empaque original, o en un recipiente herméticamente cerrado. La manteca absorbe cualquier olor que pueda tener otra comida, por eso se recomienda conservarla aislada, y si es posible en un cajón aparte dentro de la heladera, para que no cambie su sabor.
  • Para ablandarla, dejala fuera de la heladera por 15 minutos. Luego de usarla, es importante que vuelvas a colocarla en un lugar refrigerado.
  • El aire, el calor o las bacterias pueden poner rancia a la manteca, así que protegela principalmente de estos factores.
  • Podés congelarla pero, como consecuencia, cambia su consistencia. Por eso, puede entorpecer su uso culinario.